Del gobio (
kōbiós)
[1]
El gobio fresco, si lo metes en el vientre de un cerdo, lo coses bien y lo cueces en 12 sextarios
[2] de agua hasta que se reduzcan a dos, y tras haberlo colado y enfriado al aire libre, lo bebes, vaciarás el vientre sin molestias. Aplicado en forma de emplasto beneficia también a los mordidos por perros o serpientes.