lavativas. Antes de que se haga fuerte el veneno hay que administrarles una decocción de hojas de
encina,
bellotas, o
cáscaras de granada; o hacerles beber jugo de
serpol o de
centinodia con leche, o de sarmientos de
vid, o de
frambueso, o de corazón de
cañaheja tierna, o de
mirto con vino; las propias bayas del mirto majadas y remojadas en agua son de ayuda, si se toma la parte líquida de su interior; es eficaz igualmente la piel interior de las
avellanas[url=Wellm] <cruda> con alguno de los jugos dichos antes; también, [url=Wellm3.116.1]orégano bebido con lejía; les sirve de ayuda segura beber
leche caliente de burra o de vaca, si se retiene en la boca, hasta el punto de que los que las tengan en abundancia no necesitan ningún otro remedio.
6. <
Del dorýknion >
El
dorýknion, que algunos llamaron
‘belladona’ acarrea en el sabor un gusto como de leche, hipos continuos, líquido en la lengua, violento vómito de sangre; sus heces son como moco, como en los que sufren disentería. Les ayuda, antes de que se manifiesten estos síntomas, lo mismo que a los venenos anteriores: el vómito y la lavativa y todo lo que haga expulsar el veneno que se ha bebido. Les ayuda específicamente el aguamiel, la leche de burra o cabra, el vino dulce tibio bebido con
anís, las
almendras amargas, pechugas de gallina recocidas, todos los mariscos de concha, crudos o cocidos, cangrejos, crustáceos, y el jugo que se obtiene de ellos bebido.
7. Del acónito (
akónitos)
Nada más beberlo endulza la lengua con alguna astringencia, después del dulzor empieza el vértigo, sobre todo, al levantarse; provoca fluxiones de ojos, pesadez en el pecho y el hipocondrio acompañada de muchos gases. Ante esta situación debe expulsarse el veneno con vómitos y purgar el vientre con lavativa. Se usará como vomitorio
orégano,
ruda,
marrubio [con vino] o <una infusión de>
ajenjo <con
vino de ajenjo >, o de
oruga, o de
abrótano, o de
‘olivo rastrero’, o de
pinillo. También les conviene el
opobálsamo, en el peso de 1 dracma
[34] con <miel y> leche, mezclado <con el mismo peso> de castóreo,
pimienta y ruda; cuajo de cabrito, o de
liebre con vinagre. También la
escoria de hierro, de oro, de
plata incandescente apagada en vino, tomando el líquido; la
lejía tomada con vino; la gallina recocida o el caldo de las carnes grasas de vacuno tomado con vino; se dice también que el
pinillo les conviene específicamente.
8. <
De la miel de Heraclea>
[
La miel de Heraclea del Ponto donde también se da el acónito, que en Atenas se llama ‘jonia’ (
iōnía) y en Eubea ‘herrosa’ (
siderîtis)]
[35]. Les ocurre lo mismo a los que comen o beben la miel que se produce en Heraclea del Ponto. A los afectados les conviene lo mismo que a los del acónito; es fácil ayudarlos,