No tiene sentido usar frente a situaciones de mayor riesgo, remedios pequeños, si así ocurre puede que metamos al que estamos tratando en una situación de riesgo; tampoco, ante las de menor riesgo, por precipitarse inútilmente para ayudarlo, perjudicar su cuerpo.
Es muy fácil establecer un criterio por las diferencias temporales. El que actúa de forma aguda y al instante trae aparejadas molestias y peligros. El otro se demora y deja pasar más o menos tiempo. Conviene ayudar a toda prisa en las formas agudas y con muchos procedimientos al unísono, en los otros casos, con más calma. Así, por tanto, como es propio de un tratado técnico, quedan divididos convenientemente. Pasemos a continuación a ocuparnos por partes.
{1} Indicios del perro rabioso y de los mordidos por él
Hemos colocado en primer lugar, antes del resto, el apartado sobre los mordidos por perro rabioso, porque también el animal es muy abundante y cotidiano, y a continuación de ser sorprendido por la rabia se muere y hace que sea muy difícil de evitarlo. La situación de peligro que provoca es inexorable si no se usan muchos remedios. En general el perro se vuelve rabioso en los calores más intensos, aunque algunas veces, también, en los fríos que vienen después. Cuando se vuelve rabioso se aparta de la comida y la bebida, y echa por la boca y la nariz mucha flema espumosa. Y tiene mirada desgraciada y más triste que lo habitual. Ataca sin mediar ladrido a todos por igual, animales salvajes u hombres, a todos, a los conocidos y a los desconocidos, y los muerde. Al momento no acarrea nada molesto, excepto el dolor de la herida, pero después provoca el mal que se llama hidrofobia que ocurre al tiempo que espasmos, enrojecimientos por todo el cuerpo, sobre todo en la cara, sudoración y desmadejamiento. Algunos evitan la luz del sol, otros están constantemente exhaustos. Algunos ladran como perros y muerden a los que se acercan; al morder son causantes de su propio mal. <No conocemos a nadie que se haya salvado de los que han caído en este mal,> si no es que por investigación nos ha llegado la información de que se han salvado uno o dos. Eudemo
[16] dice que se salvó uno; otros afirman que Tesión cayó en este mal después de ser mordido y se salvó, otros dicen que reconfortando a un amigo con hidrofobia con buena voluntad y simpatía, cayó en su misma situación, y que tras pasar muchas penalidades se salvó. El mal es fastidiado, antes de que intente manifestarse nosotros mismos hemos salvado a muchos y sabemos de otros salvados por otros médicos.
{2} Tratamiento tópico de las mordeduras de perro rabioso
Una parte del tratamiento es común y debe ser usada por todos los mordidos por algún animal venenoso; otra es particular de los mordidos por perro rabioso, acostumbra a beneficiarlos extraordinariamente, aunque, a los que han dejado pasar tiempo desde la mordedura, les perjudica. Primero vamos a exponer ésta, después trataremos sumariamente del tratamiento común. Es necesario quemar cangrejos de río en sarmientos de viña blanca, machacar sus cenizas y guardarlas;